retrato

“¡Estoy Ofendido!” – Cómo Trabajar con Personas Altamente Sensitivas

32B46B74-C065-4B74-929D-666B60E2A8AD


Qué difícil es bregar con personas altamente “sensitivas”. Como se ofenden por todo, tratarlos es un delicado balance entre mantener la paz y no tirarlos de un avión.

La verdad es que de todas las estrategias que existen, lo mejor que puedes hacer es ignorarlos. El verdadero reto ocurre cuando se trata de alguien que tratas a diario, como un colega, un amigo, un empleado o un familiar.

Entonces, ¿qué hacemos?

Lo que sí podemos hacer es buscar la manera de no caer víctima de sus novelas. Y la mejor manera que conozco es  NO TOMANDO NADA A PERSONAL.

Así mismo es. Sea cual sea el tema, siempre habrá alguien que se ofenda por alguien que dijiste, escribiste o por lo que representas. Esto sucede mucho en personas que por alguna razón piensan que el mundo gira alrededor de ellos.

Mira este interesante ejemplo…

Hacen unos meses, un tipo me envió un largo mensaje criticando uno de mis videos de mi canal de YouTube, Juan Santiago TV. 

Aunque ya estoy acostumbrado a los mensajes hostiles (son mis fanáticos # 1), este me estuvo curioso porque a este individuo le ofendió el que usara gafas en el video.  Si… leíste bien. Se ofendió por unas fucking gafas.

Según él, yo parecía a parte de la mafia italiana (probablemente por ver tanto Scareface). También añadió que no servía para lo que hacía y que jamás me recomendaría como coach.

Pude haberme defendido. Lo podia insultar para atrás. También pude haberle explicado que es difícil grabar un video mientras conduces con el puto sol en la cara, pero preferí usar la experiencia como un momento de aprendizaje.

Cómo soy un profesional, me disculpé por haberle ofendido con mis gafas. Luego le pedí información de su canal de YouTube, su página web, las revistas para las que escribe, y dónde podía asistir a sus talleres.

¿Puedes creer que nunca me contestó? 

Esta es la moraleja de mi historia: Lo primero es que ofenderse es una decisión, no una obligación. Lo segundo es que quien se ofende lo hace, no porque sea malo, sino porque ve las cosas según su capacidad, su crianza, sus experiencias y su intelecto. Así es la vida.

Eso significa que si vez o escuchas algo que no te gusta, siempre tienes la opción de pensar, “¿Sabes qué? Cómo esto no me gusta, y probablemente no tiene que ver conmigo, me voy a enfocar en otra cosa” ¿Viste que fácil es? 

Si no te gustan los “posts” de tus amigos en Facebook, puedes ignorarlos, puedes darles unfollow, puedes removerlos, o puedes bloquearlos para que no te afecten. Pero si te pones a juzgarlos, nuevamente caíste en la trampa de creer que tú estás bien y ellos están mal. 

Si alguien importante se ofenden, trata de arreglarlo. Pero si es alguien que no aporta o que no es de tu “tribu”, ignóralo para que se vaya a jorobar a otro sitio.

Recuerda que solo tú eres responsable por tu paz y tu felicidad. Protégelo. 

Analiza la situación, discúlpate si es necesario, y aclara el mensaje para que no hayan malos entendidos.

Juancho

Suscribete a nuestro newsletter

Subscríbete para recibir las herramientas que te ayudarán a reprogramarte para el Éxito
* indicates required

Comparte este post con tus amigos

Subscribete

* indicates required

© 2019 derechos reservados